
Menudo año dejamos atrás, 2010 ha sido sin duda un gran año, no pienso decir que ha sido una mierda por la crisis, el paro y todo el coñazo político que sale día si y día también en el telediario, puesto que en lo personal y profesional me ha ido de lujo, más bien insuperable.
Cuando echas un vistazo hacia atrás en el tiempo, es curioso que nunca se recuerda lo malo, por muy malo que sea, siempre te vienen recuerdos felices y momentos inolvidables, aunque hay que decir que viviendo en el país en el que estamos y teniendo un nivel de vida medio, creo que las cosas malas que te pueden ocurrir son insignificantes (excepto muertes de seres queridos y enfermedades importantes) y aunque no lo digamos estoy seguro de que todos estamos agradecidos. De lo malo se aprende, lo superas y lo olvidas. Lo bueno lo disfrutas en el momento y tres cientos años después lo recuerdas y sigues disfrutando de ello e incluso te ríes con todas aquellas anécdotas que se cuentan una y otra vez..
¡Ufff…! Me da pena que un año así se vaya, han pasado y se han iniciando tantas cosas que aún estar por venir, que sin duda va a hacer que lo recuerde con especial cariño.
Aún así, hay quedar la bienvenida al año que entra, estoy segura de que será el doble de bueno, ya que las cosas que se han iniciado probablemente culminen en el 2011.
Sí los Dioses del Olimpo quieren y las fuerzas de la naturaleza también me gradúo en el próximo año (¡Sí, sí, sí, señor!). También hay ilusiones que están por cumplir y eso hace coger este año con más ganas.
Y sin extenderme más y dejar de escribir más ñoñería, os deseo un Feliz Año Nuevo, que disfrutéis la noche vieja y lo paséis con vuestros seres queridos.
¡Mucha felicidad y salud a todos los desdentados en el 2011!
